El estrés no siempre es pejudicial porque es una respuesta positiva, que nos ayuda a movilizarnos y a manejar adecuadamente los cambios y desafíos que van surgiendo a lo largo de nuestra vida (cambio de trabajo, rupturas de pareja, reacciones ante la enfermedad.). En estos casos, el estrés nos beneficia porque facilita que la adaptación y genera actitudes positivas y modos apropiados y beneficiosos para afrontar o solucionar dichas situaciones.
Sin embargo, si, la activación de las respuestas fisiológicas y psicológicas, es necesaria y adaptativa, el problema de estrés surge cuando estas respuestas se prologan o se intensifican, dando lugar a diferentes problemas. Problemas que afectan distintas áreas, apareciendo patologías que pueden variar en cada persona:
Área Emocional: miedo, ansiedad, irritabilidad, insatisfacción…
Área Cognitiva (pensamientos): Problemas de concentración. Preocupaciones (los pensamientos se centran repetidamente en las situaciones que están afectando negativamente, sin poder desconectar…pensando repetidamente en lo que le preocupa…),cansancio o fatiga mental
Área Conductual: cambios bruscos de humor, dificultades de relajación, depresión nerviosa, insomnio, aumento del consumo de tabaco, alcohol, comida, etc.
Área Física: ritmo cardiaco y respiratorio acelerado, dolor de cabeza, tensión muscular, problemas gastrointestinales (malestar estomacal, úlcera, diarrea, espasmos de esófago,, náuseas…), aumento o pérdida de peso. caída del cabello, problemas cutáneos (psoriasis, eccemas…), e incluso puede afectar al feto en el caso de mujeres embarazadas, etc.
En las situaciones en las que el estrés nos está perjudica, los psicólogos clínicos, podemos ayudar a las personas afectadas, para que aprendan tanto, a manejar las situaciones estresantes como, a trabajar con los pensamientos y anticipaciones que nos “disparan”.
Consuelo Tomás. Psicóloga, Especialista en Psicología Clínica.
Psicólogos Valencia. Tratamiento para el estrés. Tratamientos psicológicos.
