Los motivos del cambio del trabajo
La psicóloga Consuelo Tomás, especialista en Psicología Clínica, en el periódico “Levante” de la Comunidad Valenciana nos ayuda a entender por qué septiembre es un mes en el que las personas se muestran más dispuestas a cambiar de trabajo.
Además de algunas de las claves vertidas en dicho artículo, vamos a analizar brevemente en esta publicación del blog que ella escribe, los factores que contribuyen al cambio de trabajo en septiembre.
Septiembre es un mes que coincide en gran parte de la población con la vuelta a la rutina tras el período vacacional y, en muchos, casos, para emprender nuevos proyectos. No solo en enero, sino también transcurridas las vacaciones, se plantean nuevos objetivos en el trabajo, en el ámbito escolar, en el tiempo de ocio, etc. Además, durante las vacaciones, normalmente se tiene más tiempo para pensar, comunicarse con la familia, relacionarse con otras personas y conocer más puntos de vista o haber llegado tan cansado, por ejemplo, por mal ambiente laboral o sobrecarga de trabajo que hacen se surja la necesidad de cambio de trabajo en otras condiciones.
Los motivos por los que las personas desean cambiar de trabajo son muy diversos y entre otros, destacan los siguientes:
- Querer mejorar las condiciones laborales para disponer de más tiempo libre
- Incrementar la remuneración salarial
- Compatibilizar el horario laboral con las responsabilidades familiares
- Mejorar el horario para poder aumentar las actividades de ocio o de otra índole
- Buscar mayor flexibilidad de horarios
- Buscar mayor reconocimiento y valía profesional
- Eliminar el estrés y ansiedad experimentada en el trabajo actual
- Tener problemas en la empresa en la que se trabaja con jefes o compañeros
- Sentirse “quemado” por diferentes motivos (síndrome del burnout)
- Sentir aburrimiento y escasa motivación
- Sentir que se está estancado
- Buscar nuevas oportunidades
- Ser ambicioso
- Sentirse cómodo ante nuevos retos sin miedo al cambio
- Tener seguridad y confianza en uno mismo
- Saber poner límites y ser asertivo
- Saber manejar la incertidumbre…
Ahora bien, llama la atención que la generación millennials, que corresponde a las personas nacidas entre los 80 y primera mitad de los 90, son más proclives a cambiar de trabajo si los comparamos con generaciones anteriores. Las personas que pertenecen a la generación millennial tienden a formar la familia o tener hijos más tarde y, por ello, tienen menos cargas económicas y familiares que supongan un inconveniente a la hora de arriesgar con el cambio. Por otra parte, es una generación más preparada tecnológicamente y les motiva trabajar en equipo acorde con las nuevas políticas de empresa. De igual forma, son personas a las que les gusta apostar por nuevos retos y entienden que cambiar de trabajo les enriquece teniendo en cuenta que muchos de ellos vivieron condiciones precarias cuando se tuvieron que saltar al mercado laboral coincidiendo con la crisis económica de 2008.
No obstante, pese a que algunos expertos consideran que septiembre no es el mejor mes para cambiar de trabajo porque las empresas están inmersas en cerrar asuntos antes de fin de año o de empezar a plantearse nuevas propuestas o directrices, son sobre todo las personas que tienen trabajos estacionales en verano las que buscan trabajos más estables en septiembre.
Sea como sea, sea cuándo sea, lo importante es que las expectativas sean realistas y se valore si es necesario complementar la formación antes plantearse un cambio de trabajo, al igual que se busque información sobre la nueva empresa y puesto de trabajo antes de dar el paso y, si se quiere continuar en la misma empresa pero la falta de confianza o inseguridad, el estrés, la ansiedad, relación con compañeros dificultan el bienestar, puede ser también un buen momento para buscar ayuda psicológica.
En el Centro Psicológico Consuelo Tomás somos expertos en ayudar a ayudar a las personas a superar el síndrome del trabajador quemado (burnout) y enseñar técnicas para aumentar la confianza y saber manejar asertivamente las emociones y situaciones.
Consuelo Tomás, Psicóloga, especialista en Psicología Clínica
